lunes, 20 de junio de 2016

LOS FUNDAMENTOS DE LA LIBERTAD (ARTÍCULO FINAL)






Cuadro de Jean Steen, titulado "La Alegria de Vivir"

  El individuo, hace ya mucho tiempo atrás, pudo observar que, si actuaba de cierta forma podía alcanzar sus objetivos, con un sinfín de obstáculos, pero descubrió que generalmente siempre y cuando tuvieses el deseo necesario y la actitud adecuada podría alcanzar sus metas y de esa forma mejorar su situación anterior.

Obviamente este proceso de buscar cómo superar un estado anterior, que generalmente era de insatisfacción llevo mucho tiempo, en virtud que los medios de los cuales se disponían para alcanzar las metas eran muy limitados, escasos o en ocasiones inexistentes.

Fue precisamente por esta falta de recursos, medios y formas de alcanzar metas, que el individuo al percatarse de sus propias limitaciones y su ignorancia se vio en la necesidad de buscar cómo superar su insatisfacción.

En ese proceso de búsqueda, se dio cuenta que habían personas que tenían conocimientos y habilidades diferentes a las que él poseía, fue entonces cuando comprendió que si cooperaba con otras personas que tenían una mayor ventaja, podría alcanzar sus metas de una mejor forma y más eficientemente.

El individuo empezó a cooperar y a mejorar su anterior estado, pero observo que también mejoraban su estado anterior todas aquellas personas que participaban del proceso que se había formado libre y espontáneamente.  Cada una de estas personas tenían un fin particular por el cual cooperar con otros, no importándoles cuales eran los fines particulares, se si aprendieron muy bien que en la medida que ayudaran a otros a lograr sus fines, en esa misma medida podrían asegurarse logran los fines propios.

Posteriormente observo que ya la simple cooperación no era suficiente para alcanzar las necesidades que cada día eran superiores a las ya logradas. La cooperación en si seguía siendo muy buena, pero en ciertos momentos era escasa, fue cuando noto que si invertía en recursos que lo ayudaran a aumentar su productividad podría lograr de una mucha mejor forma sus metas.

El descubrimiento de la utilización de herramientas para facilitar el trabajo, fue la puerta grande por la que ingreso el conocimiento hacia la importancia en la inversión en los bienes de capital, ósea en la utilización de maquinas y herramientas que facilitaran el trabajo, incrementaran la producción y abarataran los costos.

Los procesos de cooperación social, libre y espontánea se multiplicaban constantemente, estos procesos hicieron que las personas se especializaran en sus trabajos. Al lograr la especialización en los trabajos las personas pudieron mejorar mucho mas su situación, ya que al ser buenos en lo que hacían, el resto de personas premiaban su buena labor utilizando sus servicios, pagando por ellos, esto hacia que se incrementara la riqueza de las personas y de esa forma se aumentaba el proceso de intercambio entre los individuos, creando una actividad economía que se fundamentaba en los procesos económicos de cooperación social, división del trabajo e intercambio libre y espontaneo.

Esos proceso económicos, se podían llevar a cabo en virtud que todas y cada una de las personas tenían algo que intercambiar, y lo tenían en propiedad, esa garantía los hacía capaces de disponer del bien y de hasta el conocimiento del cual eran propietarios para ponerlo a disposición del resto de la sociedad dentro del mercado.

La cantidad de personas creció dentro de la sociedad, lo cual hizo que alcanzar las metas fuera más complicado.  Las personas necesitaban servir mejor, trabajar más, diversificar sus actividades y mejorar sus precios, así  también, observaron que si comprendían que era lo que las personas necesitaban podían también anticipar sus actividades, y así incrementar sus oportunidades de mejorar su situación.

Nació la competencia, un nuevo impulso y un sinfín de nuevas acciones se desarrollaron.  Este nuevo condimento de la economía de mercado y los libres procesos de intercambio, dieron un empuje aun mayor al proceso de lograr las metas, ya que por medio de la competencia, se dio un efecto multiplicador en la utilización de medios para la consecución de los fines de cada una de las personas.

Los procesos de cooperación social, fueron en cada momento especializándose más y mas, al punto que se volvió necesario establecer un conjunto de reglas mínimas, que ofrecieran un campo de acción donde los individuos pudiesen cooperar e intercambian sus propiedades, de una forma lógica, coherente y espontanea, protegida por un sistema de leyes, universales, generales y abstractas e interpersonales, hechas, para garantizar la convivencia pacífica de las personas dentro de un conglomerado social que busca de muchas formas la mejor manera de alcanzar sus propias y especificas metas.

La creación de estas leyes fue necesaria, ya que la vida en sociedad exigía un riguroso comportamiento ético.   Este comportamiento ético, requería mucho trabajo, hay que ser diligente, honrado, previsor, trabajador y una larga lista de valores que garantizan el éxito de la vida en sociedad. Pero obviamente existían, existen y existirán siempre personas que están buscando como lograr sus metas sin la molestia del trabajo duro, la cooperación social y el libre intercambio.

Es por ello, que en ese momento se hizo más importante aún, que por medio de ese conjunto de leyes,  se garantizara la libre participación dentro del mercado, protegiendo los derechos de propiedad y el irrestricto cumplimiento y respeto a los contratos realizados entre los individuos como fin para alcanzar sus metas.
Este sistema de normas debiese de tener la posibilidad de garantizar a todas y a cada una de las personas que desean cooperar libre y espontáneamente en la sociedad la posibilidad de ingresar y salir del sistema, cuando sus capacidades se vean superadas por otros. Pero al mismo tiempo ese sistema debe de garantizar la protección a los derechos de propiedad que los individuos desean poner a disposición de las demás personas dentro del mercado.

Para que ese sistema sea eficaz, las leyes deben de formar un conjunto de normas, principalitas, originarias y fundamentales, que por tener esas características precisamente deben de ser pocas, pero que establezcan los criterios necesarios para normas las múltiples e infinitas posibilidades del comportamiento del individuo dentro de la sociedad.  Hechas justamente para garantizar la protección de los derechos fundamentales del individuo, los cuales se basaron en la libertad, la vida y la propiedad.

A este conjunto de infinitas relaciones interpersonales, encaminadas a satisfacer la propias necesidades de los individuos, dentro de una sociedad, utilizando y disponiendo de los mejores recursos y medios que se tengan al alcance de una forma libre y espontanea, se le llamo “Sociedad libre”.  La cual como hemos visto, está cubierta y revestida de principios éticos y se basa en la cooperación social, especialización de trabajo, respeto a los derechos de propiedad y intercambio libre y espontaneo, todo ello encaminado a lograr los fines propios de cada uno de los individuos, no importando cuales son ellos, pero si importando y mucho los medios utilizados para ellos, siempre y cuando no afecte directa o indirectamente los fines de otra u otras personas en la sociedad.

     AHORA, es importante que se comprenda un tema fundamental para la vida de los hombres libres en sociedad.  Los ideales de la libertad han satanizado grande y profusamente la idea del  “positivismo jurídico”. 

Por ello, considerándome yo mismo un positivista jurídico, veo la importancia de colocar a esta forma de aproximación epistemológica al conocimiento de la ciencia del  derecho en su justa dimensión y así demostrar que no es causa de un sin número de violaciones a los derechos de las personas, sino, totalmente al contrario, es la forma de garantizar, el perfecto conocimiento de la forma en que se garantizaran los derechos fundamentales, de una forma clara, certera y segura.

Tenemos que iniciar, recordando que la desfiguración del Positivismo jurídico, se dio posteriormente a la Segunda Guerra Mundial, cuando un solo jurista, todo la decisión, de estructurar un sistema que garantizara la total y completa protección de los derechos de los individuos.  Esta propuesta estaba encaminada a crear un ente que tuviese el poder absoluto para destruir cualquier intento de opresión por parte de las entidades de gobierno. 

Lo cual, podemos decir, que en inicio estaba muy bien, tomando en consideración que la historiografía del orden constitucional, nos demuestra que una de las funciones principales de dicha ley suprema es limitar el abuso en el ejercicio del poder.  El problema es no haber atendido o entendido, que este tribunal u orden supremo, entiéndase la Corte de Constitucionalidad, nació al amparo de una total y constante violación a todos los derechos y garantías que ya establecía una constitución, desde hace mucho tiempo, y pudiendo encontrar sus antecedentes en la famosa Carta Magna, de 1215.

Todos los principios y garantías constitucionales fueron violados por los no muy gratamente recordados Juicios de Nuremberg, los cuales fueron establecidos con una muy buena intención, buscando un muy mal fin, la “justicia Social” de los judíos que habrían logrado sobrevivir al holocausto. En el mismo orden se establece la también confusa y errada idea de la “justicia transicional”, la cual desarticula completamente la idea de igualdad ante la ley, que reclamaba la existencia de la Sociedad Libre.

Regresando a nuestro desafortunado jurista, tenemos que mencionar que, Hans Kelsen, buscando también un fin loable y justo, desarticulo la idea de libertad e igualdad que tanto deseábamos, ya que se organizo un poder superior, para controlar cualquier desorden que atentara contra ese mismo poder.

Lo que sucedió, fue que ante la ley instauramos otro poder totalitario, con la única diferencia que este es legal, y solicitado por las mismas personas o ciudadanos.   Se pensó, en ese momento que la mejor forma de regular y controlar la conducta de las personas en materia administrativa, era creando una gran cantidad de leyes, ósea se pensó que los legisladores podrían dirigir la conducta del ser humano por medio de leyes.

Obviamente no mencionaremos la interferencia que creó el derecho administrativo en la época de la Revolución Francesa, ya que ese tema lo hemos discutido en artículos anteriores, solamente mencionare, que esa fue otra forma de creación de leyes que desarticulo el principio fundamental de seguridad y certeza que establecía el positivismo jurídico.

El Positivismo Jurídico, ha sido propio del Derecho, desde muchísimo tiempo antes de Augusto Comte, que es el punto de partida, según muchos libertarios, para la creación del tema en cuestión, ahora como estructura de conocimiento nominada, si, Augusto Comte lo crea, pero si vemos, mucho tiempo atrás, ya Alfonso el Sabio, con sus doce Tablas, El mismo Código de Hammurabi, ya eran formas de positivación jurídica, y lo que buscaban era que las personas tuviesen seguridad y certeza sobre las normas de conducta que serian aplicadas y en qué forma se aplicarían, ósea, lo que se buscaba es que no existiera duda alguna  sobre las leyes, eso es lo que fomenta el positivismo jurídico, NO como mal se cree, la sobre producción de leyes para controlar la vida de los individuos.  Ese fin, es buscado por los que desean desarticular el derecho y terminar con la vida en paz y libertad. 

La sobre producción de leyes, es parte de una forma totalitaria, que busca tener el control sobre los individuos, pero no es fin del positivismo jurídico.  El positivismo jurídico, como lo dijimos, busca crear un ambiente donde todos, gobernantes y gobernados tengan la seguridad de las normas que deben de observar, especialmente los gobernantes, ya que la creación de la Constitución, como norma POSITIVA, tenía por fin primordial ese, la creación de un cuerpo que regulara y pusiera limites al ejercicio del poder.

La idea principal de crear este cuerpo de normas, es garantizar la convivencia pacífica dentro de un conglomerado social, que todos los días, crece y exige más seguridad para el libre intercambio de los títulos de propiedad que ayudaran, por medio del intercambio voluntario a alcanzar las propias metas que busca cada una de las personas.

Al tener un cuerpo de normas, universales, generales, abstractas e impersonales podremos utilizarlas en un sinfín de situaciones, donde todos los individuos tendrán que observarlas indistintamente, ya que no buscan encajar en la vida de los hombres, sino, que los hombres que tengan o realicen conductas antisociales, sean alcanzados por las normas que se crearon para castigar esas conductas, no para castigar a personas en especial.

Lejos de ser perjudicial, el postitivismo juridico, es una herramienta importantísima para el desarrollo de la vida en libertad, si aprendemos a realizar leyes basadas en verdadera técnica jurídica, contemplando un conjunto de normas que garanticen el cumplimiento de la ley y el respeto de la vida en libertad, entonces estaremos ya listos para manifestar que hemos alcanzado el tan ansiado Estado de Derecho, que debe regir la vida dentro de una sociedad libre. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario